Las encías dicen mucho sobre la salud de nuestra boca. Inflamación, sangrado o dolor son algunos de los síntomas de la acumulación de placa y que puede derivar en una afección llamada gingivitis. En el cuarto mes de las #10razonesparairatudentista desde el Colegio Oficial de Dentistas de Sevilla queremos poner el foco en la prevención de la enfermedad de las encías.
Para ello, la Dra. Contreras, colegiada n.º 41002252, nos ayuda con algunas claves que debemos tener en cuenta.
La encía recubre y protege los tejidos de soporte del diente, por lo que es fundamental prestar atención a su estado y seguir una serie de cuidados que garanticen una buena salud bucodental.
¿Has observado que te sangra la encía tras el cepillado? Esto podría deberse a la gingivitis o periodontitis y no a que tus encías puedan ser sensibles. Se trata de afecciones que surgen cuando se ha depositado placa bacteriana alrededor de las encías produciendo su inflamación. Dejar de cepillar esa zona es un error, ya que la forma de frenar este problema es cepillar correctamente todas las zonas de la boca, sin olvidar los espacios interdentales. Recuerda acudir a tu dentista para que pueda realizar una evaluación profesional del problema y recomendarte un tratamiento si es necesario.
¿Qué ocurre si no se trata la gingivitis? La gingivitis crónica puede derivar en periodontitis. En este caso, la placa que no se retira se endurece convirtiéndose en sarro. Este sarro penetra al interior de la encía provocando pérdida ósea en el tiempo que puede hacer que los dientes sufran movilidad o incluso en la pérdida de alguna pieza dental en algunos casos.
Pero hay otros síntomas, además del sangrado, que pueden avisarte de que no tienes una correcta salud de tus encías, como por ejemplo el color de estas o el mal aliento. Presentar un color rosado de tus encías es una buena señal. Sin embargo, si presentan un aspecto blanquecino, enrojecido o amoratado deberías acudir a tu dentista. Asimismo, muchos de los casos de las personas que sufren halitosis puede deberse a algún tipo de patología periodontal.
¿Cómo prevenir la enfermedad de las encías y qué hacer si ya presentamos alguna afección?
Lo principal es la higiene. La mejor forma de prevenir cualquier enfermedad periodontal es seguir un correcto cepillado, tanto dental como de las encías.
- Lleva a cabo un correcto cepillado diario de los dientes (al menos 2 veces al día).
- Usa cepillo interdental o seda dental. Esto ayudará a eliminar las bacterias que pueda haber entre los dientes.
- Usa enjuague bucal.
- Acude al dentista para revisiones periódicas y limpiezas profesionales.
En algunos casos de gingivitis, el profesional determinará la necesidad de llevar a cabo un tratamiento como por ejemplo un curetaje. ¿Sabes en qué consiste? Se trata de una limpieza profesional más profunda para eliminar el sarro acumulado y que es imposible eliminar con el cepillado. Cabe destacar que el curetaje no es lo mismo que la limpieza profesional. Mientras que la limpieza profesional es un tratamiento no invasivo y preventivo, el curetaje es un tratamiento de raspado y se realiza cuando la placa ya ha llegado hasta las raíces de los dientes. Será el dentista quien determine la necesidad de un tratamiento u otro y recuerda que este procedimiento nunca debe sustituir el cuidado diario.
Por último, cabe destacar que una correcta salud bucodental influye en una correcta salud general y que ya está comprobada la relación existente entre la periodontitis y las enfermedades cardiovasculares o el Alzheimer según un informe de consenso llevado a cabo por el grupo de trabajo conjunto de la Sociedad Española de Periodoncia y Osteointegración (SEPA) y la Sociedad Española de Neurología (SEN).